Buscar

Se presentan las bases de la futura Ley de los Usos del Tiempo, con más de 100 medidas

La semana pasada, en Madrid, se presentó el estudio de fundamentación de la Ley de los Usos del Tiempo y Racionalización Horaria en España, que incluye más de 100 propuestas para mejorar la organización del tiempo en España. La asociación Time Use Initiative ha coordinado el estudio, que ha contado con la colaboración de más de 60 personas expertas y con consultas con los principales sindicatos y patronales españoles.
foto ponentes ley tiempo

España tiene un problema con los horarios y sus usos del tiempo comparado con el resto de Europa. Esto genera pobreza del tiempo (no tener tiempo para uno mismo) e impactos negativos en salud, eficiencia, igualdad y sostenibilidad democrática y medioambiental.

El tiempo es una cuestión política y la forma de organizar el tiempo determina el tipo de modelo social establecido, que debe adaptarse a los cambios estructurales de cada época y evolucionar con el progreso de la sociedad. La importancia de regular el tiempo de trabajo es histórica. En 1919, el primer convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) se focalizó en regular el tiempo de trabajo.

Hace más de 100 años, España fue el primer estado del mundo en introducir, por ley, la jornada laboral máxima diaria de 8 horas en todos los sectores laborales (1919). Pero, desde de entonces, la sociedad y el mundo del trabajo se han transformado profundamente y el malestar horario vuelve a ser una preocupación para la mayoría de la ciudadanía. Ahora, España puede ser el primer país en hacer una Ley de Usos del Tiempo y Racionalización Horaria del siglo XXI.

La Time Use Initiative (TUI), entidad coordinadora del Estudio, explica que la futura ley debería ser holística. Es decir, que no solo establezca los mínimos regulatorios para fomentar una organización del tiempo de trabajo equilibrada (dejando un amplio espacio a la negociación colectiva), sino que abarque los usos del tiempo de forma integral, como son los horarios del prime time, de las escuelas o del comercio.

Según Marta Junqué, coordinadora del estudio y de la TUI, “necesitamos un nuevo pacto social; una Ley de Usos del Tiempo que aborde, de manera holística y suficiente, una regulación mínima para avanzar hacia una organización del tiempo equilibrada, como recomienda la OIT y la Carta Social Europea. Necesitamos una nueva organización del tiempo que contribuya directamente a mejorar la salud de las personas trabajadoras, la igualdad, la capacidad de conciliación y la corresponsabilidad y, por supuesto, que contribuyan a aumentar la productividad y la eficiencia de empresas y organizaciones. En este sentido, en el estudio se plantean 100 medidas para asegurar una organización del tiempo equilibrada.

Entre las medidas laborales destacan:

Alcanzar una ordenación del tiempo de trabajo equilibrada no pasa solamente por racionalizar y reducir el tiempo de trabajo, sino que hay otros objetivos igualmente esenciales.

  1. En primer lugar, una racionalización del tiempo de trabajo. El estado español es el país en el que las personas trabajadoras terminan más tarde su jornada laboral. Un 30% trabaja hasta las 7h de la tarde y hasta un 10% trabaja después de las 9h de la noche. Por tanto, un primer objetivo tiene que ser la racionalización del tiempo de trabajo.
    • Medida: En concreto, reducir paulatinamente la jornada semanal máxima para alcanzar las 37.5 horas en 2026 y las 32 horas semanales en 2032. La reducción de la jornada permitiría alinear la regulación laboral con una tendencia que han empezado muchos países y empresas de reducción de la jornada, con la jornada aplicable en la Administración Pública y la regulada en muchos convenios colectivos.
    • Medida: la compactación de la jornada. En concreto, proponemos establecer una única interrupción en las jornadas partidas y con una duración máxima de 1 hora, salvo que por convenio colectivo se amplíe. Limitar las interrupciones en la jornada es especialmente importante en el contrato a tiempo parcial; el contrato a tiempo parcial muy feminizado y, en muchas ocasiones, involuntario, por cuanto muchas personas que trabajan a tiempo parcial lo hacen por no encontrar trabajo a tiempo completo o por necesidades de conciliación. Por tanto, es esencial garantizar que el tiempo parcial no se extienda en exceso mediante múltiples interrupciones.
  2. En este sentido, en segundo lugar, es necesario alcanzar una ordenación del tiempo de trabajo más saludable y segura. En este punto, debemos tener en cuenta que el estrés explica el 30% de las bajas laborales y que el 60% de las personas trabajadoras afirman tener estrés en el trabajo. Por tanto, la seguridad y la salud de las personas es otro objetivo esencial en la ordenación del tiempo de trabajo.
      • Medida:  reformar de la regulación del trabajo a turnos y del trabajo nocturno. La evidencia científica nos dice que las personas que trabajan a turnos o en horario nocturno tiene mayor riesgo de sufrir problemas de salud derivados del trabajo. En consecuencia, proponemos revisar esta regulación. Así, por ejemplo, proponemos que las personas que trabajan en turnos rotatorios no puedan trabajar más de cinco noches consecutivas. O introducir un derecho de cambio de turno de trabajo para las personas mayores de 50 años para que puedan pasar de un turno de noche a un turno de día disponible en la empresa y para el que tengan la calificación profesional necesaria.
  3. El tercer objetivo que nos hemos planteado es garantizar mayor transparencia y previsibilidad en la ordenación del tiempo de trabajo. Hay personas que tienen horarios completamente variables y totalmente inciertos. No es solo que no tengan flexibilidad o autonomía para gestionar su tiempo de trabajo, sino es que, más allá, no tienen certidumbre sobre cuál será su tiempo de trabajo. Y esto, sin duda, contribuye a una mayor pobreza del tiempo.
        • Medida: reforzar la obligación de la empresa de informar a las personas trabajadoras de todos aquellos aspectos relacionados con el tiempo de trabajo, como la jornada, el horario o la regulación aplicable en la empresa de las horas extraordinarias.
  4. El cuarto objetivo que nos planteamos es la flexibilidad en la ordenación del tiempo de trabajo. Es importante aumentar la autonomía de las personas en la gestión del tiempo de trabajo para, de esta manera, contribuir a incrementar la satisfacción de las personas trabajadoras y favorecer también a la productividad de las empresas.
    • Medida: Apostar por una mayor flexibilidad pactada en la organización del tiempo de trabajo (ej. Bolsas de horas).
  5. El quinto objetivo es alcanzar una ordenación del tiempo de trabajo corresponsable e igualitaria. Sin lugar a duda, la actual organización del tiempo de trabajo dificulta e, incluso en algunos casos, imposibilita la conciliación de la vida familiar y personal. Muchas personas —mayoritariamente mujeres— se ven obligadas a reducir su jornada o, incluso, renunciar a su carrera profesional para poder conciliar sus responsabilidades familiares y laborales.
    • Medida: ampliar las opciones de reducción de la jornada, permitiendo, por ejemplo, que la reducción de jornada pueda ser discontinua a lo largo de la semana, del mes o del año o permitir la reducción de jornada para personas que convivan en el mismo domicilio, aunque no exista una relación de parentesco. También proponemos ampliar los permisos retribuidos e incluir, por ejemplo, un permiso retribuido para asistir a visitas médicas de hijos y familiares.
  6. Y, finalmente, el sexto objetivo es fomentar una mayor participación en la empresa en la ordenación del tiempo de trabajo.
    • Medida: que las empresas de 50 o más personas trabajadoras deban elaborar y aplicar un Plan de Mejora de la Organización del Tiempo de Trabajo y los Usos del Tiempo. El objetivo es que el Plan, negociado entre la empresa y la representación legal de la plantilla, incluya un diagnóstico de cuál es la situación en la empresa y, en atención a ello, adopte medidas necesarias para avanzar hacia unos horarios más equilibrados.

Entre las medidas más transversales, destacan:

  1. Promover unos horarios más racionales en el sector audiovisual. Una reivindicación histórica, pero muy importante a nivel de salud y descanso y muy significativa para la sensibilización ciudadana. Con respecto a países de nuestro entorno, la hora punta de los programas televisivos empiezan 2 horas más tarde, con lo que retrasa nuestra hora de dormir y la cantidad de horas dormidas.
    • Medida: Un pacto de Estado para avanzar el prime time y la promoción de una programación horaria audiovisual responsable que tenga en cuenta al público objetivo más vulnerable, especialmente menores y adolescentes.
  2. Avanzar los horarios de cierre del comercio. España es uno de los países donde de forma habitual el comercio cierra más tarde (el 30% de los españoles a las 19h aún están trabajando). En la mayoría de los países europeos, el horario de cierre del comercio es entre las 17h-19h.
    • Medida: Compactar la pausa del mediodía de los comercios y cerrar antes de las 19h de la noche.
  3. Otro de los pilares clave para la organización horaria, es los horarios escolares. Unos horarios educativos más saludables, más conciliadores.  España tiene más horas lectivas que la media de UE y OCDE, aunque el rendimiento académico está por debajo de la media de la OCDE y la UE y los alumnos piden más tiempo libre y pasar más tiempo con sus familias. 
    • Medida: Adaptar los horarios de las escuelas y centros de formación a los ritmos circadianos, empezando las clases más tarde para adolescentes y jóvenes universitarios, y seguir el modelo de “centros abiertos” de Portugal y Alemania, sin aumentar las horas lectivas, pero aumentado los extraescolares.
  4. Más participación de la ciudadanía y el tejido social y productivo en los horarios cotidianos de su municipio. Esto es una medida que ciudades europeas llevan varias décadas aplicando para mejorar sus horarios y servicios (ej.  Fomentar la entrada en la ciudad durante la hora punta)
    • Medida: Establecer la obligatoriedad de tener Planes de Organización del Tiempo del Municipio para municipios mayores de 50.000 habitantes.
  5. Por último, que la Administración Pública sea ejemplo e impulsor de estos horarios más racionales tanto internamente, humanizando los horarios especialmente de los altos cargos (ej. Horarios de plenos y ruedas de prensa y actos públicos) como externamente, impulsando medidas para:
    • Establecer medidas de estímulo para empresas y organizaciones para este cambio cultural y organizacional (estímulo económico, fiscal o de reconocimiento social).
    • Creación de una Mesa de Concertación Social para los Usos del Tiempo y Racionalización Horaria en España con los agentes sociales más representativos.
    • Definir campañas de sensibilización hacia la ciudadanía, para unos usos del tiempo más equilibrados y saludables.

La Ley del Tiempo debería ser de las principales medidas a aprobar en la próxima legislatura

El Plan de Gobierno para esta legislatura era aprobar una Ley de Usos del Tiempo y Racionalización Horaria. Por ese motivo, el Ministerio de Trabajo y Economía Social solicitó un estudio de fundamentación, coordinado por la TUI (la principal iniciativa a nivel mundial que promueve el derecho al tiempo) y que ha contado con la colaboración de más de 60 personas expertas, así como consultas con los principales sindicatos y patronales españoles. 

El adelanto electoral no ha facilitado su tramitación parlamentaria y el diálogo social necesario. En lo que respecta a este asunto, Junqué destaca que “valoramos positivamente que se presenten las conclusiones de este estudio y esperamos que sirvan para fundamentar la Ley de los Usos del Tiempo en la próxima legislatura, objetivo que todos los partidos políticos deberían llevar en su programa electoral”

La presentación contó con la intervención de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Dña. Yolanda Díaz; miembros del equipo redactor del estudio, Marta Junqué, Ignacio Buqueras, la Dra. María Amparo Ballester, la Dra. Anna Ginés y el Dr. Gonzalo Pin; así como intervenciones por vídeo de la OIT y la Red Mundial de Municipios y Regiones por las Políticas del Tiempo.

foto grupo estudio ley tiempo
Scroll al inicio